jueves, 6 de marzo de 2014

MILITANCIA Seamos Libres: nace una nueva organización política

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Luego de la elección de Pablo Ferreyra, dos de las agrupaciones que conformaban la lista de Alternativa Popular, El Gleyzer – Movimiento Cultural y Social y la Corriente de Militancia Popular Santiago el Negro Avilés (Ex Agrupación Kiki Lezcano), formalizarán su fusión.

Se trata del Movimiento Popular Seamos Libres y el acto será el próximo 9 de marzo. APU conversó con Jonathan Thea, Pablo Ferreyra y Aldana Martino, tres de sus dirigentes, para que brindaran una aproximación a esta nueva organización del campo popular.

P: ¿Qué es el Movimiento Popular Seamos Libres?
Jonathan Thea (JT): Seamos Libres es una organización política que nace de la fusión de El Gleyzer y la Corriente de Militancia Popular Santiago el Negro Avilés y la incorporación de Pablo a su mesa política. Todos venimos de años de construcción política territorial, social y estudiantil convencidos de la necesidad de avanzar en mayores niveles de unidad política. Confirmamos nuestros acuerdos en la última elección legislativa en la que confluimos, junto a otras agrupaciones del campo popular, en la campaña electoral de Alternativa Popular que llevó a Pablo a la Legislatura.
¿Y cómo definieron esa fusión?
Pablo Ferreyra (PF): El Gleyzer, la Corriente y yo veníamos trabajando en conjunto y articulando acciones en los territorios y en los barrios desde hace unos dos años. Pero fue en el trabajo cotidiano que nos dimos durante la campaña que encontramos que no sólo teníamos la misma lectura de la realidad política, sino que la línea y la lógica de construcción era prácticamente la misma. Entonces, empezamos a pensar en esta fusión.
Aldana Martino (AM): Entendemos que si hay fuerzas militantes que alcanzan ese grado de relación y coincidencia, la unificación se vuelve una responsabilidad. Es un salto cualitativo que las necesidades de la etapa nos exigen.
P: ¿El resto de las organizaciones que integraban la lista electoral se sumaron a Seamos Libres?
JT: No, igualmente seguimos trabajando con muchas de ellas en distintos ámbitos. Alternativa Popular (AP) contuvo expresiones muy diversas de la militancia popular de la ciudad, donde pudimos convivir diferentes tradiciones, miradas y construcciones. Y eso fue lo que hizo que fuera tan rica la experiencia, ya que nos permitió llegar a muchos sectores. Vamos a seguir profundizando el trabajo con muchas de las agrupaciones de AP y al mismo tiempo vamos a consolidar a Seamos Libres en la ciudad y construirlo a nivel nacional.
PF: Lo que pasó es que, si bien todas las otras agrupaciones que formaron parte de la lista realizaron un importante aporte y muchas lo siguen haciendo incluso a nivel legislativo, entre nosotros se generó un nivel de comunión política que, en cierta medida, era previsible. Tanto El Gleyzer y la Corriente como yo, venimos de una tradición de izquierda, nacional y popular, y eso de alguna manera generó un mayor nivel de afinidad, ya que además de compartir la lectura de la coyuntura, compartíamos un mismo recorrido y una misma identidad.
AM: Los últimos diez años fueron de recuperación y acumulación política en nuestro país, en consonancia con el proceso latinoamericano. Las políticas orientadas a la soberanía y la ampliación de derechos del kirchnerismo han sido un piso para el crecimiento cuanti y cualitativo de la militancia. Seamos Libres se propone construir una fuerza que tenga la claridad política de entender esto y, al mismo tiempo, de no construir estructuras de militancia pasivas, asumiendo que el rol de la juventud organizada no puede ser ese, sino que debe ser crítico e impulsor de políticas orientadas al verdadero cambio, construyendo una agenda propia para nuestro pueblo.
Otros espacios de la izquierda les critican haber ido en una lista colectora del kirchnerismo. ¿Se siguen considerando parte de la izquierda?
JT: Por supuesto. Los sectores que nos critican son los más sectarios de la izquierda argentina, con los que nunca compartimos mucho realmente, o sectores que tienen una lectura muy distinta a la nuestra en esta coyuntura y que, para nosotros, han terminado tributando, de manera indirecta, a la estrategia de la derecha. Nosotros somos de izquierda por el lugar que asumimos a la hora de la lucha de clases, porque queremos una sociedad sin explotados y porque estamos dispuestos a adoptar las formas de lucha que cada momento de la historia nos exija para ese objetivo. Entendemos que de esto se trata la definición de izquierda, asumiendo los desafíos y las complejidades de cada etapa. Y eso se hace viviendo dentro del proceso que vive el pueblo, porque somos parte de él.

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