14 Jun 2013 06:21 pm | La Néstor Vive
Poniéndole el pecho a cinco décadas de abandono
El accidente que tuvo lugar ayer en la estación Castelar nos llenó de tristeza a todos los argentinos. Pero, a quienes militamos este proyecto político nacional y popular, nos produjo además esa incómoda sensación de bronca e impotencia, la misma que describió en su discurso de ayer la Compañera Presidenta, porque esta situación llega en un momento en el que el Gobierno Nacional ha encarado la reforma del sistema ferroviario más ambiciosa, cuanto menos, de los últimos 50 años.
Desarrollados entre fines del Siglo XIX y comienzos del XX por capitales británicos y puestos inicialmente al servicio del transporte de productos primarios hacia el puerto porteño que demandaba el modelo agroexportador de aquel entonces, los ferrocarriles supieron ser motivo de orgullo durante los años 50, cuando el primer peronismo los recuperó para el Estado. La estatización no consistió simplemente en un “cambio de firma”: “Ferrocarriles Argentinos” replanteó el diseño de la red, dándole un sentido estratégico para el desarrollo del país, conectando entre sí distintas provincias y promoviendo, de esta manera, el crecimiento de los pueblos del interior y el auge de las economías regionales. Los trenes fueron así uno de los símbolos de ese modelo de país basado en la justicia social, la independencia económica y la soberanía política.
Lejos de esta concepción, el golpe de 1955 inauguró lo que sería una decadencia más que prolongada del sistema, boicoteándolo, vaciando el patrimonio y endeudando Ferrocarriles Argentinos, fomentando una estructura corrupta e ineficiente. Esta situación vino a legitimar la concesión a empresas privadas y el cierre del grueso de los ramales en los 90.
Hace un año, el Gobierno Nacional encaró un plan, el de mayor envergadura en décadas, para revertir esta situación, tanto en lo que hace a transporte urbano de pasajeros como al transporte de cargas de larga distancia. Ese plan se encuentra hoy en pleno funcionamiento, como cualquier trabajador que se tome a diario las principales líneas férreas puede constatar.
En breve enumeración de algunas de las obras en curso desde la designación por parte de la Presidenta del Ministro Randazzo en el área de transporte, podemos mencionar:
-Renovación total (ya completa) de las vías entre Once y Moreno de la línea Sarmiento: más de 20.500 metros de vías nuevas, con más de 30.000 nuevos durmientes de hormigón.
-Renovación total de las vías de la línea Mitre, ramal Retiro-Tigre y renovación de pasos a nivel.
-Recuperación del Tren de la Costa y el Belgrano Cargas para el Estado, tras las deficiencias presentadas en el servicio de las concesionarias.
-Construcción de 44 nuevos pasos a nivel en 16 municipios del conurbano bonaerense.
-Asignación de 400 gendarmes para custodiar las estaciones ferroviarias y mejorar la seguridad de los pasajeros.
-17 vagones nuevos para el ramal Buenos Aires- Mar del Plata del tren de pasajeros.
-Licitación de obras para renovación de 300 kilómetros de vías en el servicio de pasajeros Rosario-Buenos Aires.
-Compra de cuatro formaciones nuevas en el Sarmiento para prestar el servicio especial entre Once-Castelar
-Compra y puesta en funcionamiento de 3 formaciones nuevas en la línea Mitre, los primeros coches incorporados desde 1961.
-Reparación integral de once formaciones de la línea Sarmiento ya terminadas. Otros 45 vagones en reparación.
-Compra a la empresa estatal ferroviaria china de 25 FORMACIONES DE 9 VAGONES CADA UNA NUEVAS para la línea Sarmiento, a entregarse a partir de marzo de 2014.
-Instalación de molinetes para ingreso y egreso de las estaciones del Sarmiento utilizando tarjeta SUBE.
-Reparación integral de la estación Once (vías, techos, andenes y señalización), con más de 10.000.000 de pesos invertidos.
-Renovación de ocho pasos a nivel completa y otras siete en ejecución para la línea Sarmiento.
-Colocación de pantallas LED en las estaciones de las líneas Mitre y Sarmiento para informar a los pasajeros respecto a las frecuencias de los coches. Puesta en valor de ocho estaciones del ramal Once-Moreno del Sarmiento.
-Sistema de notificación de frecuencias del tren para que los usuarios lo chequeen a través de sus teléfonos celulares.
En un año, se invirtió más que en los anteriores cincuenta. Por eso, nos genera una impotencia especial el accidente; por eso exigimos que la Justicia por una vez esté a la altura de las circunstancias e investigue cómo corresponde, para explicarnos a los argentinos –y en especial a las víctimas y sus familias- qué fue lo que pasó ayer.
Pero también por todo esto, es que defendemos el rumbo, el que sabemos que no está exento de dificultades, tropiezos y dolores. Porque no creemos en la actitud oportunista de los buitres de la oposición, que quieren que todo fracase para sacar réditos mezquinos. Que, además, no se subieron a un tren en su vida.
¿O se imaginan acaso al banquero de la JP Morgan Alfonso Prat Gay o a De Narváez, que intenta simular que cocina guiso con la hornalla apagada, tomándose a la mañana el Sarmiento para ir al laburo?
Porque por primera vez en décadas tenemos un Gobierno que fija la recuperación ferroviaria como prioridad, porque este Gobierno camina al lado del pueblo, lo entiende. Porque este gobierno ES pueblo.
Por todo eso, en este momento de dolor, expresamos nuestra solidaridad con las víctimas, pedimos a la Justicia que investigue y arroje luz sobre este extraño hecho y reafirmamos que el rumbo elegido es el que los argentinos precisamos para volver a tener esos trenes de los que supimos estar orgullosos.

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