DERECHOS HUMANOS
JUEVES 06 DE FEBRERO DE 2014 15:40
En el texto repudian "los agravios, mentiras y tergiversaciones del informe presentado por "la Junta interna de Trabajadores, Ate - Sitios De Memoria". El debate en torno al Instituto Espacio de la Memoria.
Por el Consejo Directivo del IEM
El Instituto Espacio para la Memoria repudia los agravios, mentiras y tergiversaciones del “Informe De La Junta Interna De Trabajadores/Ate-Sitios De Memoria, C.A.B.A.”, del 24 de enero de 2014, maliciosamente titulado “Vaciamiento y desinterés por parte del Consejo Directivo del Instituto Espacio para la Memoria sobre las Políticas Públicas de Memoria”. El mismo constituye una manifestación agravada de la práctica permanente de una dirigencia sindical que desde la creación del IEM intenta sustituir a su dirección legal, con metodologías inconcebibles en quienes declaman compartir los objetivos de memoria, verdad y justicia. En su lamentable líbelo la “Junta” no vacila en el intento de desacreditar, en algunos casos incluso con nombre y apellido, a integrantes de este Consejo, cuya opción de vida ha sido siempre el compromiso militante en la defensa de los derechos humanos. Fueron precisamente esas historias de vida las que determinaron su designación por unanimidad de los miembros del Consejo, en ese momento integrado por la totalidad de los organismos de derechos humanos, incluyendo algunos que luego se alejaron.
La historia de la humanidad, enseña que cuando se transitan momentos difíciles, complejos, que ponen en riesgo construcciones valiosas y conquistas logradas, algunos militantes se quedan en el camino, otros no pueden sostener su responsabilidad y no faltan quienes anteponen sus intereses personales por encima de los colectivos. La descalificación de quienes sostienen las banderas populares, las conquistas alcanzadas, y pretenden seguir avanzando, es un método tradicional de la derecha, en el que juegan una función significativa quienes, consciente o inconscientemente, trabajan para ellos, apelando a procedimientos patoteriles y amorales como forma de “hacer política”, que ponen al desnudo sus propios intereses mezquinos e individualistas. La naturaleza plural del IEM y su modo de construcción colectiva, sobre la base del diálogo y el respeto recíproco, sostenido durante años con ética y dignidad es un obstáculo a esos oscuros propósitos, y por eso se busca destruirlo mintiendo descaradamente. A continuación detallamos algunos ejemplos.
Hemos trabajado incansablemente en apoyo a los procesos orales y públicos en los que se están juzgando los crímenes de lesa humanidad cometidos por el Terrorismo de Estado, contribuyendo con la investigación permanente desde el IEM, con la información requerida por los tribunales, fiscalías y querellas intervinientes, con la asistencia constante de la dirección, de miembros del Consejo Directivo y de trabajadores del Instituto a todas las audiencias, en donde a través de la escucha y participación en las mismas, con todo lo que significa el recorrido en el relato de las víctimas directas, familiares y testigos, se continuó profundizando esa reconstrucción de los hechos y aportando material pertinente. En ese marco algunos compañeros fueron incluso víctimas de malos tratos y amenazas por parte de individuos asistentes que reivindicaban la represión, hechos que fueron denunciados oportunamente por el IEM.
En esa línea, el Instituto editó la colección “Diario de la Memoria”, dando cuenta de la marcha de los juicios(1), como parte de la tarea de permanente apoyo a todos los juicios, incluso a los que se llevan adelante en el interior del país, con presencia institucional y respondiendo también a la demanda de compañeros que trabajan en esas causas muchas veces en gran soledad. La tarea del IEM en la materia fue generando una herramienta que devino en instancia permanente de consulta y también para el aporte de pruebas con el valioso quehacer llevado a cabo en los Centros Clandestinos de Detención, Tortura y Exterminio (CCDTyE), soporte material de muchas de esas experiencias en donde el terror se adueñó de miles de vidas humanas.
En tal sentido la enorme y valiosa labor desarrollada por el IEM en los ex CCDTyE también sentó precedentes en la recuperación de estos sitios de memoria, como por ejemplo el protocolo realizado con tribunales competentes respecto de la modalidad de intervención que hoy se constituyen en prueba material del accionar del Terrorismo de Estado.
Se han encarado trabajos de mantenimiento, conservación y renovadas obras en los sitios, tendientes a la preservación de la memoria, articulando acciones con el equipo técnico correspondiente, que se han traducido en licitaciones públicas para diversas obras así como también para la compra de materiales, equipos, herramientas, ropa de trabajo, entre otros elementos.
Parte de la tarea de conservación, preservación y mantenimiento fue volcada en publicaciones institucionales(2). Cabe aquí una mención especial respecto de las publicaciones del IEM, que se han destacado siempre por su excelencia y calidad tanto en la riqueza de sus contenidos y la pluralidad de sus voces, como en su presentación, jerarquizando la comunicación alternativa en la comprensión de la importancia de estas herramientas en la lucha de nuestros pueblos y el debate de ideas.
Así el IEM bregó incansablemente por ir construyendo la autonomía y autarquía que la ley de su creación establece, de una instancia novedosa de gestión, también en lo que a la disponibilidad de fondos para su funcionamiento se refiere, denunciando permanentemente las restricciones presupuestarias impuestas por el Gobierno de la Ciudad. Como ejemplo citamos el recurso de amparo presentado por los organismos que integran el Instituto y que tuvo también resultados sin precedentes en materia de resguardo de la autarquía.
Asimismo, a lo largo de su existencia el IEM siempre denunció las condiciones de empleo precarias que desde hace largos años afectan a los trabajadores de la C.A.B.A., reclamando condiciones dignas para los mismos, mediante diversas denuncias y acciones públicas y ante autoridades competentes, en defensa del IEM y sus trabajadores, que llevaron adelante sostenidamente el equipo de Dirección y su Consejo Directivo(3).
De esos reclamos conjuntos ninguno de sus mentores pretendió nunca capitalizarlos en el plano individual. Se trató de una lucha colectiva y los logros y méritos también han tenido siempre ese carácter. Así cada año hemos peleado por mejorar las condiciones salariales y de trabajo tanto de los empleados de planta como de los contratados, denunciando la precarización de esta modalidad y poniendo la autonomía y autarquía del IEM al servicio de esas convicciones, instaurando un salario básico para los trabajadores del Instituto que, más allá de nuestros denodados esfuerzos por mejorarlo permanentemente, está muy por encima del establecido para los empleados de la C.A.B.A. También en pos de la equiparación salarial el IEM ha reclamado sostenidamente el otorgamiento de las Unidades Retributivas por Servicios Extraordinarios (URSES) para los trabajadores en relación de dependencia, logrando luego de años de reclamos y acciones diversas su inclusión en el presupuesto del IEM(4).
En materia de seguridad de los trabajadores el Instituto ha cumplido debidamente con la cobertura de seguros de accidentes. La documentación correspondiente desmiente las falacias a las que con total impudicia recurren quienes están tutelando otros intereses inconfesados(5).
Desde el IEM respetamos y saludamos la pluralidad en la composición del movimiento de derechos humanos y de otras organizaciones sociales, compartimos distintas instancias en el largo recorrido de lucha contra la impunidad, y jamás utilizaremos la descalificación, la calumnia y la tergiversación contra quienes pueden tener diferencias circunstanciales pero comparten desde la diversidad los diferentes escenarios de esa lucha común. Aprovechamos la oportunidad para agradecer también a muchos de sus exponentes las expresiones de solidaridad que hemos recibido, y las manifestaciones de apoyo y afecto ante las afrentas personales, y la operación montada contra el instituto, y su oposición a estas prácticas que lejos están de ser expresión de un movimiento que se caracterizó por ser fundante de un capital simbólico sin precedentes en la lucha histórica por Memoria, Verdad y Justicia.
Tampoco nos es ajeno el hecho de que toda esta campaña está instrumentada coincidentemente con la firma de un convenio entre el Gobierno Nacional y el Gobierno de la Ciudad que implica la virtual disolución del IEM.
Desde el IEM hemos llevado adelante desde el inicio de su conformación y durante todos estos años una labor creativa sin precedentes y pionera en sus expresiones compartiendo e instalando herramientas de difusión, transmisión y construcción de la memoria e historia de los hechos ocurridos durante el terrorismo de Estado, elaborando teoría a partir de acciones innovadoras, y trabajando sin pausa a pesar de las permanentes dificultades y obstáculos provenientes de quienes están contra de las políticas públicas de memoria, pero también de quienes les son funcionales, se mimetizan y son los que en la práctica vehiculizan el objetivo de difamación. En tal sentido hemos trabajado denodadamente para construir lo que hoy es el IEM, una herramienta de todos y para todos al servicio de la lucha por los derechos humanos.
En esta ocasión el « informe » de la Junta coincide temporalmente, con el convenio mediante el cual el gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires se desprende de todos los « centros clandestinos de detención, tortura» del período del terrorismo de estado, y le entrega al gobierno nacional, a pedido de este, su tenencia por veinte años, junto con las competencias, funciones y personal del IEM. Ello implica el « vaciamiento real » de una institución creada en el año 2005 por demanda de los organismos de derechos humanos, la decisión del entonces Jefe de Gobierno y la unanimidad de los miembros de su Legislatura, y que ha desarrollado una valiosa labor en cumplimiento de sus objetivos definidos por la ley 961: “el resguardo y transmisión de la memoria e historia de los hechos ocurridos durante el Terrorismo de Estado, de los años ´70 e inicios de los ´80 hasta la recuperación del Estado de Derecho, así como los antecedentes, etapas posteriores y consecuencias, con el objeto de promover la profundización del sistema democrático, la consolidación de los derechos humanos y la prevalencia de los valores de la vida, la libertad y la dignidad humana”.
No se trata de una casualidad, sino de un accionar concertado destinado a descalificar la actividad del IEM, que les resulta indispensable para su destrucción y, eliminadas la independencia, autonomía y autarquía, dejar la construcción de la memoria, y su contribución a la verdad y la justicia, en manos del gobierno de turno.
Por eso, frente a la inescrupulosidad y oportunismo de quienes actúan por intereses espurios, reiteramos nuestro compromiso de seguir luchando, guiados por nuestras convicciones y la coherencia que hemos mantenido durante toda nuestra existencia, tanto en el plano individual como institucional, leales a la memoria de quienes lucharon y dieron su vida por una sociedad más justa y solidaria.
El Instituto Espacio para la Memoria repudia los agravios, mentiras y tergiversaciones del “Informe De La Junta Interna De Trabajadores/Ate-Sitios De Memoria, C.A.B.A.”, del 24 de enero de 2014, maliciosamente titulado “Vaciamiento y desinterés por parte del Consejo Directivo del Instituto Espacio para la Memoria sobre las Políticas Públicas de Memoria”. El mismo constituye una manifestación agravada de la práctica permanente de una dirigencia sindical que desde la creación del IEM intenta sustituir a su dirección legal, con metodologías inconcebibles en quienes declaman compartir los objetivos de memoria, verdad y justicia. En su lamentable líbelo la “Junta” no vacila en el intento de desacreditar, en algunos casos incluso con nombre y apellido, a integrantes de este Consejo, cuya opción de vida ha sido siempre el compromiso militante en la defensa de los derechos humanos. Fueron precisamente esas historias de vida las que determinaron su designación por unanimidad de los miembros del Consejo, en ese momento integrado por la totalidad de los organismos de derechos humanos, incluyendo algunos que luego se alejaron.
La historia de la humanidad, enseña que cuando se transitan momentos difíciles, complejos, que ponen en riesgo construcciones valiosas y conquistas logradas, algunos militantes se quedan en el camino, otros no pueden sostener su responsabilidad y no faltan quienes anteponen sus intereses personales por encima de los colectivos. La descalificación de quienes sostienen las banderas populares, las conquistas alcanzadas, y pretenden seguir avanzando, es un método tradicional de la derecha, en el que juegan una función significativa quienes, consciente o inconscientemente, trabajan para ellos, apelando a procedimientos patoteriles y amorales como forma de “hacer política”, que ponen al desnudo sus propios intereses mezquinos e individualistas. La naturaleza plural del IEM y su modo de construcción colectiva, sobre la base del diálogo y el respeto recíproco, sostenido durante años con ética y dignidad es un obstáculo a esos oscuros propósitos, y por eso se busca destruirlo mintiendo descaradamente. A continuación detallamos algunos ejemplos.
Hemos trabajado incansablemente en apoyo a los procesos orales y públicos en los que se están juzgando los crímenes de lesa humanidad cometidos por el Terrorismo de Estado, contribuyendo con la investigación permanente desde el IEM, con la información requerida por los tribunales, fiscalías y querellas intervinientes, con la asistencia constante de la dirección, de miembros del Consejo Directivo y de trabajadores del Instituto a todas las audiencias, en donde a través de la escucha y participación en las mismas, con todo lo que significa el recorrido en el relato de las víctimas directas, familiares y testigos, se continuó profundizando esa reconstrucción de los hechos y aportando material pertinente. En ese marco algunos compañeros fueron incluso víctimas de malos tratos y amenazas por parte de individuos asistentes que reivindicaban la represión, hechos que fueron denunciados oportunamente por el IEM.
En esa línea, el Instituto editó la colección “Diario de la Memoria”, dando cuenta de la marcha de los juicios(1), como parte de la tarea de permanente apoyo a todos los juicios, incluso a los que se llevan adelante en el interior del país, con presencia institucional y respondiendo también a la demanda de compañeros que trabajan en esas causas muchas veces en gran soledad. La tarea del IEM en la materia fue generando una herramienta que devino en instancia permanente de consulta y también para el aporte de pruebas con el valioso quehacer llevado a cabo en los Centros Clandestinos de Detención, Tortura y Exterminio (CCDTyE), soporte material de muchas de esas experiencias en donde el terror se adueñó de miles de vidas humanas.
En tal sentido la enorme y valiosa labor desarrollada por el IEM en los ex CCDTyE también sentó precedentes en la recuperación de estos sitios de memoria, como por ejemplo el protocolo realizado con tribunales competentes respecto de la modalidad de intervención que hoy se constituyen en prueba material del accionar del Terrorismo de Estado.
Se han encarado trabajos de mantenimiento, conservación y renovadas obras en los sitios, tendientes a la preservación de la memoria, articulando acciones con el equipo técnico correspondiente, que se han traducido en licitaciones públicas para diversas obras así como también para la compra de materiales, equipos, herramientas, ropa de trabajo, entre otros elementos.
Parte de la tarea de conservación, preservación y mantenimiento fue volcada en publicaciones institucionales(2). Cabe aquí una mención especial respecto de las publicaciones del IEM, que se han destacado siempre por su excelencia y calidad tanto en la riqueza de sus contenidos y la pluralidad de sus voces, como en su presentación, jerarquizando la comunicación alternativa en la comprensión de la importancia de estas herramientas en la lucha de nuestros pueblos y el debate de ideas.
Así el IEM bregó incansablemente por ir construyendo la autonomía y autarquía que la ley de su creación establece, de una instancia novedosa de gestión, también en lo que a la disponibilidad de fondos para su funcionamiento se refiere, denunciando permanentemente las restricciones presupuestarias impuestas por el Gobierno de la Ciudad. Como ejemplo citamos el recurso de amparo presentado por los organismos que integran el Instituto y que tuvo también resultados sin precedentes en materia de resguardo de la autarquía.
Asimismo, a lo largo de su existencia el IEM siempre denunció las condiciones de empleo precarias que desde hace largos años afectan a los trabajadores de la C.A.B.A., reclamando condiciones dignas para los mismos, mediante diversas denuncias y acciones públicas y ante autoridades competentes, en defensa del IEM y sus trabajadores, que llevaron adelante sostenidamente el equipo de Dirección y su Consejo Directivo(3).
De esos reclamos conjuntos ninguno de sus mentores pretendió nunca capitalizarlos en el plano individual. Se trató de una lucha colectiva y los logros y méritos también han tenido siempre ese carácter. Así cada año hemos peleado por mejorar las condiciones salariales y de trabajo tanto de los empleados de planta como de los contratados, denunciando la precarización de esta modalidad y poniendo la autonomía y autarquía del IEM al servicio de esas convicciones, instaurando un salario básico para los trabajadores del Instituto que, más allá de nuestros denodados esfuerzos por mejorarlo permanentemente, está muy por encima del establecido para los empleados de la C.A.B.A. También en pos de la equiparación salarial el IEM ha reclamado sostenidamente el otorgamiento de las Unidades Retributivas por Servicios Extraordinarios (URSES) para los trabajadores en relación de dependencia, logrando luego de años de reclamos y acciones diversas su inclusión en el presupuesto del IEM(4).
En materia de seguridad de los trabajadores el Instituto ha cumplido debidamente con la cobertura de seguros de accidentes. La documentación correspondiente desmiente las falacias a las que con total impudicia recurren quienes están tutelando otros intereses inconfesados(5).
Desde el IEM respetamos y saludamos la pluralidad en la composición del movimiento de derechos humanos y de otras organizaciones sociales, compartimos distintas instancias en el largo recorrido de lucha contra la impunidad, y jamás utilizaremos la descalificación, la calumnia y la tergiversación contra quienes pueden tener diferencias circunstanciales pero comparten desde la diversidad los diferentes escenarios de esa lucha común. Aprovechamos la oportunidad para agradecer también a muchos de sus exponentes las expresiones de solidaridad que hemos recibido, y las manifestaciones de apoyo y afecto ante las afrentas personales, y la operación montada contra el instituto, y su oposición a estas prácticas que lejos están de ser expresión de un movimiento que se caracterizó por ser fundante de un capital simbólico sin precedentes en la lucha histórica por Memoria, Verdad y Justicia.
Tampoco nos es ajeno el hecho de que toda esta campaña está instrumentada coincidentemente con la firma de un convenio entre el Gobierno Nacional y el Gobierno de la Ciudad que implica la virtual disolución del IEM.
Desde el IEM hemos llevado adelante desde el inicio de su conformación y durante todos estos años una labor creativa sin precedentes y pionera en sus expresiones compartiendo e instalando herramientas de difusión, transmisión y construcción de la memoria e historia de los hechos ocurridos durante el terrorismo de Estado, elaborando teoría a partir de acciones innovadoras, y trabajando sin pausa a pesar de las permanentes dificultades y obstáculos provenientes de quienes están contra de las políticas públicas de memoria, pero también de quienes les son funcionales, se mimetizan y son los que en la práctica vehiculizan el objetivo de difamación. En tal sentido hemos trabajado denodadamente para construir lo que hoy es el IEM, una herramienta de todos y para todos al servicio de la lucha por los derechos humanos.
En esta ocasión el « informe » de la Junta coincide temporalmente, con el convenio mediante el cual el gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires se desprende de todos los « centros clandestinos de detención, tortura» del período del terrorismo de estado, y le entrega al gobierno nacional, a pedido de este, su tenencia por veinte años, junto con las competencias, funciones y personal del IEM. Ello implica el « vaciamiento real » de una institución creada en el año 2005 por demanda de los organismos de derechos humanos, la decisión del entonces Jefe de Gobierno y la unanimidad de los miembros de su Legislatura, y que ha desarrollado una valiosa labor en cumplimiento de sus objetivos definidos por la ley 961: “el resguardo y transmisión de la memoria e historia de los hechos ocurridos durante el Terrorismo de Estado, de los años ´70 e inicios de los ´80 hasta la recuperación del Estado de Derecho, así como los antecedentes, etapas posteriores y consecuencias, con el objeto de promover la profundización del sistema democrático, la consolidación de los derechos humanos y la prevalencia de los valores de la vida, la libertad y la dignidad humana”.
No se trata de una casualidad, sino de un accionar concertado destinado a descalificar la actividad del IEM, que les resulta indispensable para su destrucción y, eliminadas la independencia, autonomía y autarquía, dejar la construcción de la memoria, y su contribución a la verdad y la justicia, en manos del gobierno de turno.
Por eso, frente a la inescrupulosidad y oportunismo de quienes actúan por intereses espurios, reiteramos nuestro compromiso de seguir luchando, guiados por nuestras convicciones y la coherencia que hemos mantenido durante toda nuestra existencia, tanto en el plano individual como institucional, leales a la memoria de quienes lucharon y dieron su vida por una sociedad más justa y solidaria.
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1 “La hora de la Justicia”. Algunos de esos periódicos fueron sobre los juicios conocidos como“Vesubio”, “Automotores Orletti”, “Plan Sistemático”, “Atlético, Banco, Olimpo” y “ESMA”, entre otros, además de otras publicaciones como el “Manual para víctimas y testigos en causas vinculadas al Terrorismo de Estado”, “El libro de los juicios”, afichetas con las fotos de los represores juzgados y un programa de radio “Oral y Público”, primera emisión radial dedicada exclusivamente a esta temática. Por otra parte la entonces directora ejecutiva declaró en numerosas oportunidades en diversos juicios, así como miembros del Consejo Directivo, llevando también a los estrados la experiencia institucional del IEM y otras como resultado de una lucha colectiva en la reconstrucción de la memoria.
2 Véase el Anexo de la Memoria 2012, “Las marcas de la memoria”, entre otras, como por ejemplo las Memorias anuales y la diversa folletería específica sobre cada uno de los sitios así como los libros sobre los ex CCDTyE.
3 Respecto al permanente reclamo en esta materia, se pueden consultar en la página web del IEM las versiones taquigráficas de las presentaciones realizadas ante la Comisión de Presupuesto, Hacienda, Administración Financiera y Política Tributaria de la Legislatura de la C.A.B.A. por parte de la Directora Ejecutiva, la Secretaria Ejecutiva y miembros del Consejo Directivo.
4 Actualmente el sueldo mínimo que percibe un empleado del IEM es de 7.460.- pesos. Cada año esa suma se actualiza en relación a la partida presupuestaria correspondiente y otras variables en resoluciones aprobadas oportunamente por el Consejo Directivo del IEM.
En relación al tema de las Unidades Retributivas por Servicios Extraordinarios (URSES) gracias a las numerosas acciones realizadas por el equipo de Dirección del IEM y su Consejo Directivo, la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires incluyó en el presupuesto del Instituto Espacio para la Memoria para el ejercicio 2012 la suma de pesos seiscientos mil ($600.000) en dicho concepto, crédito que fue posteriormente restringido por el Poder Ejecutivo en su totalidad desde el mes de enero de 2012.
Hasta fines de diciembre de 2012 el Instituto Espacio para la Memoria se vio imposibilitado de hacer efectivo el reconocimiento de Unidades Retributivas por Servicios Extraordinarios (URSES) debido a las restricciones presupuestarias impuestas por el Ministerio de Hacienda del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires.
Mediante Expediente Nº 821286/2012 el Instituto Espacio para la Memoria requirió al Ministro de Hacienda de la Ciudad de Buenos Aires la liberación del crédito restringido; siendo dicha solicitud reiterada mediante Nota Nº 2012-02315783-IEM.
Con fecha 18 de diciembre de 2012 el Ministerio de Hacienda comunicó al Instituto Espacio para la Memoria que el crédito requerido se encontraba disponible; en virtud de la sentencia dictada por la sala II de la Cámara de Apelaciones en lo Contencioso Administrativo y Tributario de la Ciudad de Buenos Aires (como resultado de la acción judicial mencionada iniciada por miembros del Consejo Directivo).
Por lo expuesto, recién en ese momento, por Resolución 110-IEM-12 de fecha 21/12/2012, el IEM pudo aprobar la asignación de las Unidades Retributivas por Servicios Extraordinarios al personal de Planta Permanente del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires que reviste en el IEM, reconociendo dichos servicios extraordinarios para todo el ejercicio 2012.
Para el ejercicio 2013, se solicitó similar monto en concepto de Unidades Retributivas por Servicios Extraordinarios (URSES) ante la Legislatura, que fue incluido en el presupuesto del Instituto Espacio para la Memoria para el ejercicio 2013, pagándose así URSES hasta la fecha. Cualquiera que conozca mínimamente el procedimiento de la administración pública entiende que este resultado no es producto de una gestión reciente sino de una continuidad y consecuencia en el reclamo.
5 Durante el ejercicio 2012, la cobertura del seguro contra accidentes del personal del IEM que prestó servicios bajo la modalidad de locación de servicios correspondió a la compañía San Cristóbal S.M.S.G., cuya póliza fue la Nº 05-06-01051418/4. Durante diciembre de 2012, mediante Expediente Nº 2012-2997502-MGEYA-IEM, el IEM gestionó ante la Dirección General de Seguros del GCABA un nuevo seguro contra accidentes personales para el año 2013, siendo la cobertura vigente entre el 01/01/2013 y el 30/04/2013 correspondiente a la compañía San Cristóbal S.M.S.G., cuya póliza fue la Nº 05-06-01060001/0; y la cobertura a partir del 30/04/2013 y hasta el 30/04/2014 la correspondiente a la compañía Provincia Seguros, con póliza Nº 548884.
1 “La hora de la Justicia”. Algunos de esos periódicos fueron sobre los juicios conocidos como“Vesubio”, “Automotores Orletti”, “Plan Sistemático”, “Atlético, Banco, Olimpo” y “ESMA”, entre otros, además de otras publicaciones como el “Manual para víctimas y testigos en causas vinculadas al Terrorismo de Estado”, “El libro de los juicios”, afichetas con las fotos de los represores juzgados y un programa de radio “Oral y Público”, primera emisión radial dedicada exclusivamente a esta temática. Por otra parte la entonces directora ejecutiva declaró en numerosas oportunidades en diversos juicios, así como miembros del Consejo Directivo, llevando también a los estrados la experiencia institucional del IEM y otras como resultado de una lucha colectiva en la reconstrucción de la memoria.
2 Véase el Anexo de la Memoria 2012, “Las marcas de la memoria”, entre otras, como por ejemplo las Memorias anuales y la diversa folletería específica sobre cada uno de los sitios así como los libros sobre los ex CCDTyE.
3 Respecto al permanente reclamo en esta materia, se pueden consultar en la página web del IEM las versiones taquigráficas de las presentaciones realizadas ante la Comisión de Presupuesto, Hacienda, Administración Financiera y Política Tributaria de la Legislatura de la C.A.B.A. por parte de la Directora Ejecutiva, la Secretaria Ejecutiva y miembros del Consejo Directivo.
4 Actualmente el sueldo mínimo que percibe un empleado del IEM es de 7.460.- pesos. Cada año esa suma se actualiza en relación a la partida presupuestaria correspondiente y otras variables en resoluciones aprobadas oportunamente por el Consejo Directivo del IEM.
En relación al tema de las Unidades Retributivas por Servicios Extraordinarios (URSES) gracias a las numerosas acciones realizadas por el equipo de Dirección del IEM y su Consejo Directivo, la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires incluyó en el presupuesto del Instituto Espacio para la Memoria para el ejercicio 2012 la suma de pesos seiscientos mil ($600.000) en dicho concepto, crédito que fue posteriormente restringido por el Poder Ejecutivo en su totalidad desde el mes de enero de 2012.
Hasta fines de diciembre de 2012 el Instituto Espacio para la Memoria se vio imposibilitado de hacer efectivo el reconocimiento de Unidades Retributivas por Servicios Extraordinarios (URSES) debido a las restricciones presupuestarias impuestas por el Ministerio de Hacienda del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires.
Mediante Expediente Nº 821286/2012 el Instituto Espacio para la Memoria requirió al Ministro de Hacienda de la Ciudad de Buenos Aires la liberación del crédito restringido; siendo dicha solicitud reiterada mediante Nota Nº 2012-02315783-IEM.
Con fecha 18 de diciembre de 2012 el Ministerio de Hacienda comunicó al Instituto Espacio para la Memoria que el crédito requerido se encontraba disponible; en virtud de la sentencia dictada por la sala II de la Cámara de Apelaciones en lo Contencioso Administrativo y Tributario de la Ciudad de Buenos Aires (como resultado de la acción judicial mencionada iniciada por miembros del Consejo Directivo).
Por lo expuesto, recién en ese momento, por Resolución 110-IEM-12 de fecha 21/12/2012, el IEM pudo aprobar la asignación de las Unidades Retributivas por Servicios Extraordinarios al personal de Planta Permanente del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires que reviste en el IEM, reconociendo dichos servicios extraordinarios para todo el ejercicio 2012.
Para el ejercicio 2013, se solicitó similar monto en concepto de Unidades Retributivas por Servicios Extraordinarios (URSES) ante la Legislatura, que fue incluido en el presupuesto del Instituto Espacio para la Memoria para el ejercicio 2013, pagándose así URSES hasta la fecha. Cualquiera que conozca mínimamente el procedimiento de la administración pública entiende que este resultado no es producto de una gestión reciente sino de una continuidad y consecuencia en el reclamo.
5 Durante el ejercicio 2012, la cobertura del seguro contra accidentes del personal del IEM que prestó servicios bajo la modalidad de locación de servicios correspondió a la compañía San Cristóbal S.M.S.G., cuya póliza fue la Nº 05-06-01051418/4. Durante diciembre de 2012, mediante Expediente Nº 2012-2997502-MGEYA-IEM, el IEM gestionó ante la Dirección General de Seguros del GCABA un nuevo seguro contra accidentes personales para el año 2013, siendo la cobertura vigente entre el 01/01/2013 y el 30/04/2013 correspondiente a la compañía San Cristóbal S.M.S.G., cuya póliza fue la Nº 05-06-01060001/0; y la cobertura a partir del 30/04/2013 y hasta el 30/04/2014 la correspondiente a la compañía Provincia Seguros, con póliza Nº 548884.
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